02/10/2021, Madrid Las Ventas. Toros de Domingo Hernández y Garcigrande. Bien presentados de diverso juego.
El Juli. De corinto y oro
Emilio de Justo. De nazareno y oro
Juan Ortega. De carmelita y oro
El devenir de la esperada Feria de Otoño, primer ciclo de lo que estábamos olvidando y esperaba con anhelo, no había empezado bien. La primera suspendida por la lluvia, quedó en promesa para el próximo día 8 de octubre, la novillada pasó sin pena ni gloria y los vitorinos dejaron claro que no tienen nada que ver con aquellos de D. Victorino Martí Andrés.
Llegó el día en que aparecen figuras en el cartel y toros a los que se adaptan y he ahí que retorna a las ventas aquel torero que el día 4 de Julio en la corrida de la cultura, le dió por cortarles tres orejas a los toros del ganadero de Guadalix.
Pues bien, el de Torrejoncillo volvió a Madrid para dejar otro sello de toreo de verdad. Hubo de ser con Farolero donde se encajó con una faena variada y de toreo puro yendo de menos a más, primero doblándose de manera magistral para llevarle a los medios, luego en redondos alargando mucho el trazo hasta la cadera y con la zurda, elevar el toreo puro más si cave. Una faena rotunda y otra puerta grande.
Julián en su línea hizo el esfuerzo de molestarse poco, eso sí con criterio, porque saber sabe cuando quiere y le gusta el oponente. Una oreja chusquerilla suficiente para el madrileño y tan pancho para casa.
Esperábamos a Juan Ortega, quedó inédito, un trasteo con gusto en el tercero y una faena al sexto con retazos de mucho gusto y es que este torero tiene ese duende sevillano que atesoran muy poquitos. Se embarulló con la espada y todo quedó en eso.
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