OREJA PARA EL MAS APLICADO

12 de Marzo de 2015 Madrid Las Ventas, menos de media plaza.

NOVILLOS: de Hnos. Sánchez Herrero. de impecable presentación, mansos flojos y descastados.

DANIEL RUEDAS. Pinchazo, media. Un aviso. Silencio. Estocada casi entera, contraria. Silencio

JORGE ESCUDERO. Pinchazo, media caída y nueve descabellos. Silencio. Pinchazo hondo y cinco descabellos. Dos avisos. Silencio

ANTONIO LINARES. Gran estocada. Oreja. Estocada caída. Palmas de sus seguidores

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La preciosa novillada de los hermanos Sánchez, resulto vacía de casta y fuerza y la réplica de los coletas nula y escasa. Linares se llevó un premio de sus paisanos, que eran muchos, por ser el más aplicado de la terna.

Hay que reconocerle al novillero su aptitud y disposición, incluso el ejemplo de como hay que venir a Madrid con gnas, todo lo contrario que sus compañeros de terna. La disposición le llevó al atropello en algunos momentos de la faena y en los momentos de intento de temple descuidó la colocación cayendo en los defecto clásicos de estar fuera de la suerte. No nos gustó que intentara apuntillar el toro él mismo y se montara el alboroto tras los fallidos intentos del propio matador y el tercero que lo intentaron en repetidas veces. Hay que recordar que la plaza de Madrid tiene un puntillero, D. Angel Zaragoza, que posee la suficiente experiencia para resolver casos como el de ayer y evitar el desastroso espectáculo.

Tanto Rueda como Escudero, andubieron anodinos, sin recursos, sin sitio. Y volvemos a lo de siempre, Rueda llevaba tres años sin torear y Escudero se conformó con un paseillo la pasada temporada.

Hay que destacar la desastrosa lidia que se le dio a la novillada, totalmente descolocados los subalternos, desastrosos los picadores, infumables los tercios de banderillas. Hay que resaltar la salvaguarda del Fini, muy bien en banderilla y en la brega de 5º.

Insistimos que la empresa debería traer a Madrid, novilleros con más bagaje, aunque entre medias incorporara alguno de menos, es decir compensar los carteles para darles la importancia de la plaza e incentivar a la afición.