SE ESPERABA MAS

21/09/2014 Madrid, Las Ventas, Un quinto de plaza.

Toros de Partido de Resina, bien presentados y de diverso juego

JOSÉ MARÍA LÁZARO. Estocada y dos descabellos. Silencio. Dos pinchazos y estocada. Un aviso. Silencio

PÉREZ MOTA. Estocada corta contraria. Silencio. Estocada. Saludos.

RUBÉN PINAR. Dos pinchazos y bajonazo. Palmas. Pinchazo, media y tres descabellos.

Se esperaba más del encierro de Partido de Resina. Si la totalidad de los toros fueron aplaudidos de salida por su impecable lámina, muy el el tipo Pablo Romero, no cumplieron las expectativas. De manera genérica acusaron falta de casta 2º, 3º y 6º de clara mansedumbre, Más bravo el 1º que sufrió un fuerte castigo en varas, El 4º destrozado por el picador Manuel Cordero, con dos varas impresentable, una baja y otra muy trasera Y un 5º que sirvió y se fue inédito al desolladero.

Lázaro estuvo anodino con el primero que llegó a la muleta con cierta movilidad a pesar del castigo, le faltó transmisión para elaborar una faena plana. Se fue a puertagayola y volvemos a decir que esta es una suerte peligrosa y de practicarla, debería ser en el segundo del lote para evitar que de haber percance que el festejo en un mano a mano. El cuarto, se vino al relance a chiqueros y allí lo recibió Manuel Cordero, dejándole más que inválido, con el toro casi parado poco pudo hacer el matador.

Pérez Mota, consintió una lidia desastrosa al segundo de la tarde, recibió demasiados capotazos en sus huidas del caballo, midió mucho en banderillas y llegó a la muleta con un peligro sordo, el gaditano lo intento y consiguió robarle algún muletazo por los adentros. El quinto metió bien la cara de salida y lo trasteó bien por verónicas, ese fue el momento que el toro le dijo al torero lo que quería, se lució en varas Paco Vallejo, picando en sitio y dosificando el castigo. Llegó a la muleta con movilidad y el matador nos dio el sermón del toreo moderno, en linea y toreando en la oreja, aún así fueron coreados por parte de los tendidos.

El de Albacete se fumó el peor lote. El tercero, manso de solemnidad se rajaba a cada muletazo hacia dentro, muchos esfuerzos baldíos para sujetar al manso, muy feo el bajonazo, pero quizás se lo merecía. El sexto otro manso que se defendió desde el principio, midió a todos regalando embestidas a arreones y con mucha intención, llegó a la muleta bronco y con mucho peligra. Rubén estuvo firme muy por encima de su enemigo tragando mucha quina.

Aquí le tenéis en centro sin destocar, tan grande como malo, Manuel Cordero, que dejó para el arrastre al 4º, Tronador II Cárdeno Bragao