26/05/2016. Madrid. Las Ventas, Vigesimoprimera corrida de abono. Casi lleno.
Toros de PARLADÉ, grandes como mulos, con poco fondo y escasos de casta,
JUAN JOSÉ PADILLA. Bajonazo. Un aviso. Saludos. Estocada. Saludos.
IVÁN FANDIÑO. Dos `pinchazos, medio bajonazo y cinco descabellos. Un aviso. Silencio. Estocada desprendida. Saludos.
JOSÉ GARRIDO. Tres pinchazos y descabello. Un aviso. Silencio. Dos pinchazos. Un aviso. Silencio.
640 kg de toro |
El encierro de Parladé, no tuvo mas que kilos, vacíos de casta, llegaron a la muleta desfondados, defendiéndose y mal-embistiendo. Otra desastrosa bueyada que sigue llevando el sello bodeguero para detrimento de otros encastes olvidados.
Honradez y nada más fue lo que puso Padilla en el ruedo venteño, ganas de novillero, portagoyola, inicio de faena de hinojos, arriesgado en banderillas y en algún momento esas facultades de lidiador del Padilla de antaño que se tragaba lo mas duro de la cabaña, fue el repertorio que lucio, digno de agradecimiento, frente a los moruchos.
Fandiño, en su segunda actuación, se ha ido de vacío de Las Ventass, mala feria del de Orduña que corrobora el mal momento que está pasando, en su favor, el encontronazo con cuatro toros que no sirvieron y en su contra, la falta de aptitud y la apatía demostrada.
Garrido, en su primer San Isidro de matador, no ha tenido a el Santo de cara, en su primera actuación se tragó la descastada corrida de Alcurrucen y en esta segunda, los bueyes de Parladé. En ambas ha puesto voluntad, destacar que el lote de ayer le tocaron dos mulos de cara alta y embestida incierta que le pusieron las cosas difíciles.
Volvemos a las andadas, en Madrid se lidian pocos toros, mucha carne, poca casta y mucho Juan Pedro, de estos últimos, demasiados y esta plaza, debe ser el termómetro, no solo de toreros, si no también de ganaderos, de todos los ganaderos. Ya es hora de abrir puertas y dejarnos de tantos Juan Pedro y sus sucursales.
Volvemos a las andadas, en Madrid se lidian pocos toros, mucha carne, poca casta y mucho Juan Pedro, de estos últimos, demasiados y esta plaza, debe ser el termómetro, no solo de toreros, si no también de ganaderos, de todos los ganaderos. Ya es hora de abrir puertas y dejarnos de tantos Juan Pedro y sus sucursales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario