01/05/2016. Madrid, Las Ventas, Un cuarto de plaza.
Novillos del Conde de Mayalde. Mansos, noblotes y con pocas fuerzas.
MIGUEL ANGEL SILVA. Tres pinchazos y estocada caída. Dos avisos. Silencio. Pasó a la enfermería al cortarse con la espada.
CLEMENTE. Estocada. Silencio. Estocada y cinco descabellos. Silencio. En el que mató por Silva. Estocada. Silencio.
ALVARO GARCIA. Dos pinchazos, pinchazo hondo y siete descabellos. Dos avisos. Silencio. Dos pinchazos y estocada caída. Silencio.
Una vez más la terna de novilleros nos decepcionó, es lástima que aquella garra y disposición de los novilleros de antaño que se encartelaban en Madrid halla desaparecido. Por otro lado, los asesores de estos jóvenes deberían tener en cuenta la rotundidad de la plaza de Las Ventas y dirigir a sus pupilos de acuerdo a la circunstancias. Si no hay material, la mano de obra sobra y ha de adecuarse a la situación para no acabar escuchando pitos y palmas de tango a mitad de una tediosa faena.
Los coletas contaron con poco material. Vimos al de Zafra, algún detalle suelto con el único novillo
a salvar del encierro, elaboró una faena discontinua y falta de transmisión.
Clemente que tuvo tres oportunidades, fue incapaz de resolver ninguna, se diluyó en un mar de trapazos, incapaz de colocarse en el sitio y con falta de quietud. Tres faenas deslucidas, sosas que tuvieron la virtud de la brevedad.
El madrileño García avalado por un bagaje de triúnfos, tampoco estuvo a la altura. Dos faenas largas tediosas en las que no hubo nada destacable, en el tercero, agobiado por los avisos estuvo a punto del recibir el tercero y en el quinto le faltó acoplamiento y serenidad.
Lo único bueno de la tarde lo protagonizó Juan Navazo en el tercio de banderillas al primero de la tarde.
Parte facultativo de Miguel Angel Silva. Presenta sección completa del tendón extensor de la mano derecha y herida incisa en segundo dedo de la misma mano, de pronóstico menos grave.
No hay comentarios:
Publicar un comentario