Lleva días circulando por facebook la foto de D. Julián y su toro de Cancún bien afeitadito como manda el Señor.
Una más de las tropelías de los ofendidos comunicadores, una más de los derechos de pernada que practican.
El Juli en Cancún |
El mal de la fiesta está dentro y se llama G5, figurones mentirosos del toreo que pasean por los cosos su desfachatez con el consentimiento de las empresas, toreando en exclusiva el monoencaste obligando a ganaderos serios a mandar sus reatas al matadero. Confeccionan los carteles a su antojo, cerrando puertas a compañeros. Nunca en la historia del toreo ha habido una asociación de figurones que hiciera tanto daño a la fiesta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario