09/08/2014 San Lorenzo de El Escorial (Madrid) Algo menos de media plaza.
TOROS de Carlos Charro, desiguales de presentación y juego. Nobles y toreables. Se notó mucho el trabajo del barbero.
ANTONIO FERRRERAS. Estocada. Oreja. Pinchazo y estocada. Oreja. Bajonazo. Palmas
MIGUEL ABELLAN. Estocada. Dos orejas. Pinchazo en la suerte de recibir, pinchazo y estocada. Saludos. Estocada. Dos orejas.
Tarde muy entretenida, donde hubo cosas de interés gracias a la disposición de los matadores dispuestos a dar espectáculo desde el minuto uno. Triunfaron los toreros, se divirtió el público y triunfó hasta el ganadero con una corrida de deshechos, salvo el segundo toro de nombre Escribano, que tuvo calidad y transmisión. Los toros se fueron sin picar
Y de interés hubo dos faenas de Ferreras ejerciendo maestría, la primera a un toro noblote que se movió hasta mitad de faena y tuvo que dosificar para que le durara y la del quinto, un mansurrón rajao al que enseñó a embestir, lástima del feo bajonazo que le privó de la tercera oreja.
Abellan reaparecía después de la cogida de Valencia, dolorido, pero no se le notó. Estuvo variado con el capote y destacado con la muleta, sobre todo en el segundo con una faena variada que mantuvo alto el interés hasta el momento de la muerte.
Hubieron detalles como el quite a la limón de la foto y los que ofrecieron ambos toreros al sobresaliente Salvador Ruano. El espectáculo de banderillas de Ferreras que para ver un bien par hubo de intentarlo nueve veces.
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