Novillos: de El Puerto San Lorenzo y La Ventana del Puerto, y un sobrero lidiado en 6º lugar de José Mª López. De impecable presentación y diverso juego.
TOMAS ANGULO. Estocada casi entera. Saludos. Bajonazo. Vuelta por su cuenta, muy protestada.
DAVID DE MIRANDA. Estocada caída. Saludos. Pinchazo y estocada. Saludos.
ANDRES ROCA REY. Estocada caída. Oreja. Media. Un aviso. Oreja.
La novillada salmantina, muy en la línea de El Raboso, cumplió con la espectación, con la presencia de una corrida de toros y la diversidad de comportamiento. Hubo un tercero con chispa y genio, un cuarto con casta y claridad en la embestida y un quinto con clase que destrozó Rafael Carbonell con una desastrosa vara en la paletilla que cambió el buen tranco que tenía el novillo de salida.
Los novilleros con más bagaje que lo último que vimos, estuvieron en la linea que deben tener, "Ganas" y la tarde fue hacia arriba. Hubo competencia en quites el los seis novillos, con tafalleras ajustadas
Angulo se peleó con un primero que le costaba humillar, pero el coleta con oficio resolvió la papeleta. El cuarto, con más calidad, permitió al pacense dibujar momentos de buen toreo vertical y muy aplomado, le faltó continuidad para redondear la faena, pero nos dejó esos trazos de buen sabor.
Otro novillero a seguir es el onubense David de Miranda, tiene la virtud de la verticalidad y corre la mano con soltura, nos impactó la quietud en un quite al que abrió plaza, con el capote a la espada con una cercanía de asustar. No le dio muchas opciones su primero que protestaba por el pitón izquierdo y solo nos dejo ver al matador en redondo. El quinto muy maltratado en varas,llegó parado a la muleta fruto de la lesión producida por la desastrosa actuación del picador.
Grata fue la sorpresa que nos dio el peruano, completó una tarde rotunda en su presentación en Las Ventas, dejó una firma de firmeza, valor a raudales y conceptos muy claros de su toreo, le cortó una oreja al de Fraile a base de tesón y quietud, que le costó la primera voltereta. En el que cerraba plaza, volvió a la firmeza y a poner su valor en ciernes, dos veces le echó al lomo el burel, pero lejos de amedrentarse volvió a la cara para llevar al toro muy toreado, con la muleta en la cara y sin descomponer la figura, media en buen sitio bastó para doblar al novillo y salir a la calle Alcalá a hombros de los capitalistas.
Buen balance lleva el inicio de temporada en Madrid, tan solo en la encerrona de Fandiño no se tocó pelo, en los otros tres festejos ha habido orejas y en el cuarto Puerta Grande
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