LA HISTORIA INTERMINABLE

03/06/15. Madrid, Las Ventas, Vigésimo séptima de feria. Lleno de no hay billetes.

Toros: De VICTORIANO DEL RÍO/CORTÉS y un sobrero lidiado en 6º lugar, de MONTALVO, mal presentados, mansos y descastados, por salvar algo, primero y cuarto toreables.

EL JULI. Media estocada desprendida y tres descabellos. División . Estocada corta tendida y trasera Palmas. Estocada trasera desprendida. Silencio.
MIGUEL ÁNGEL PERERA. Pinchazo y media estocada trasera. Silencio. Estocada y descabello. Un aviso. Palmas. Estocada. Silencio. Malo de solemnidad el encierro del ganadero de Guadalix, desde la chota infame lidiada de salida, hasta el mulo de 651 kg que cerró el grupo de mansos. La actuación del los toros de la sierra de Madrid, bajó muchos enteros en comparación a la del día 28 de Mayo que tuvo cierto interés. Tal parece que las rutilantes figuras del g-5 quisieran que la creación histórica de su grupo en favor de la fiesta, imponga además de su exigente impronta su toreo modernista. Tan solo Talavante con una oreja ramplona ha tocado pelo en esta feria. Esta historia interminable y blindaje del nuevo grupo financiero, añade la dictadura de su toreo. Pero he aquí que en esta plaza cabemos más que en Cáceres o Brihuega y Olivenza. y los de Aemany enclavelados consumidores desmesurados del gin tonic, se ven incomprendidos y ofendidos por las protestas de los aficionados añejos, no pudiendo expresar su berrea con la impunidad que lo hacen en otros cosos donde son mayoritarios y se atreven, ayudados del eufórico poder que les producen  sus refrescos a insultarnos. ¿Hay peor insulto que el que muestran las imágenes? Julián Julián Perera Perera La magistral clase de toreo modernista que nos dieron los dos matadores, volvió a dejar patente la mentira infame del toreo de carrusel, la falta de vergüenza torera en una plaza como Madrid y en una feria como San Isidro, quedando patente que el único interés que tiene para ellos venir a la incómoda plaza de la capital es el alto caché.  Julián Julián Perera Perera Por hablar de lo sucedido, con brevedad, al cúmulo de desatinos y destoreo hay que añadirle el mérito a D. Julián de la desastrosa dirección de lidia, se dieron circunstancias y se le recriminaron situaciones tales como haber siete toreros, entre oro y plata y dos picadores en el ruedo y el toro se picó el solito donde quiso. De lo ocurrido en el ruedo solo hubo destacable una réplica de Perera por gaoneras muy ajustadas a un quite del Juli, el resto fue una tarde de destoreo y cubrir el trámite. Hubo una buena vara de Bernal al toro devuelto y pare de contar. Lo mejor de la tarde sin duda alguna, fue el silencio sepulcral durante la interpretación del HIMNO NACIONAL y la sonora ovación unánime al terminar, ejemplo de educación para independentistas antitaurinos.