02/10/2018. Madrid Las Ventas. Cuarta y última de Otoño. Tres cuartos de entrada.
Toros de ADOLFO MARTÍN, bien presentados de diverso juego, Carpintero de gran calidad.
RAFAELILLO. Estocada y descabello. Saludos con protestas. Pinchazo y estocada. Saludos.
EL CID. Media estocada trasera. Saludos. Media estocada y descabello. Un aviso. Saludos.
MORENITO DE ARANDA. Pinchazo y pinchazo hondo. Silencio. Dos pinchazos y estocada. Silencio.
Sorpresa el encierro de Adolfo, sin alimañas, con tres toros dulces 2º, 4ºy 5º y un excelente Carpintero, lidiado en 1º lugar.
Rafaelillo, que tuvo el premio de enlotar a Carpintero. Se dejó ir un toro de triunfo grande, fue tres veces de largo al caballo, empujó con los dos pitones tuvo fijeza en banderillas y llegó a la muleta con tranco, repitiendo y haciendo el avión por los dos pitones y el murciano se diluyó en un baile de trapazos, toreo hacia afuera descargando la suerte y Carpintero embistiendo y embistiendo, pidiéndole a su matador otro trato mas digno a su bravura. En el cuarto, que se llevó un tremenda vara, Rafaelillo volvió al destoreo pero Pecador no se conformó y le protestó y le exigió poniéndole en algunos apuros que el matador resolvió con la solvencia habitual.
El Cid, volvió a pasar por Madrid como un esperanza, siempre esperado con el recuerdo de grandes faenas, tuvo en sus manos la dulzura de Sombrerillo al que realizó una faena demasiado técnica, abusando de la bondad del toro sin obtener lo bueno que tenía. Se repitió la historia con Murcianito, demasiado oficio para un toro que se dejaba y que con una lidia mas ajustada hubiera propiciado triunfo, Habrá que seguir esperando, pero esta vez se le escapó.
Morenito tuvo el peor lote, los dos mansos del encierro. Pero tampoco tuvo el de Aranda la aptitud requerida para resolver la papeleta, poco esfuerzo y brevedad fueron las constantes de las dos faenas.
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