Suenan atronadores los ecos del triunfo de José Tomás en Nimes y es de ley reconocer que el gran torero ha vuelto a dejar su impronta una vez más y sus incondicionales hablaran largo y tendido durante mucho tiempo de la gesta.
Jamás pondremos en duda la torería y el valor exagerado del diestro de Galapagar, ni su mística, ni su autoridad taurina, pero hay más toreros en el escalafón que realizan gestas y estas no tienen la trascendencia que debieran en los medios taurinos. Todos los periódicos, emisoras de radio, páginas web, bloggs, hablan de la matinal de Nimes, pero son pocos los que dan la noticia de las diez orejas y dos rabos del Fundi en Fuenlabrada, ¿POR QUE?
José Pedro protagonizó otra encerrona el mismo día 15 con cuatro toros de encaste Domeqc y la chispa de dos de su suegro José Escolar, y los desorejó con tanto valor y dignidad torera como su compañero Tomás.
El Fundi, procedente de una camada de toreros de Madrid, que encabezó Joselito y acompañó José Luis Bote, ha demostrado en su trayectoria la maestría de un torero que tragó encastes muy duros, que encandiló al exigente público francés, que triunfó en América, que con mucha dificultad se metió a Las Ventas en el capacho, que ha triunfado en muchas e importantes ferias, que se ha dejado su sangre frente a moruchos infumables. ¡Que más quieren los doctos críticos!
Quede claro que esto no es una comparación, si no una reivindicación para un torero que se despide de los ruedos lleno de dignidad y vergüenza torera. ¡Dios quiera que el la feria de otoño le embista un toro MAESTRO!
No hay comentarios:
Publicar un comentario