02/05/2017. Plaza de la Real Maestranza. Octava corrida. Menos de tres cuartos de entrada.
Toros de GARCÍA JIMÉNEZ. Desiguales de presentación, nada de casta y con cierta movilidad.
MORANTE DE LA PUEBLA. Estocada desprendida. Ovación. Pinchazo, pinchazo hondo y descabello. Un aviso. Saludos.
MIGUEL ÁNGEL PERERA. Estocada trasera. Saludos. Bajonazo. Un aviso. Saludos.
JAVIER JIMÉNEZ. Pinchazo y estocada contraria. Saludos. Pinchazo hondo y dos descabellos. Un aviso. Palmas.
Muy justo y desigual el encierro, no les sienta bien el clima salmantino a los Juan Pedro. Hubo toros utreros adelantados y alguno al borde de la edad, eso sí sin asustar a nadie. Seguimos con la tónica de la falta del toro.
Morante ya ha dejado de ser el talismán de Sevilla, en otras épocas no se dejaba un cuarto de plaza vacío. Y no estuvo mal del todo, abrió la esperanza con una serie de naturales de mucho temple, para mejorarlos si cabe en el cuarto, donde brilló la exquisitez y el buen gusto torero, poco acertado con los aceros ahí quedaron las pinceladas del de la Puebla.
Muy insistente Perera, con sus dos toros para conseguir poco. En su primero que se enculó en tablas todo el esfuerzo fue en baldío y en el que hizo quinto se diluyó en un mar de muletazos que nunca llegaron al público.
Muy por encima de su lote, estuvo Javier Jimenez en una extensa faena a su primero, al que a base de sobar, fue capaz de robarle alguna embestida. Inédito con el mulo que cerro plaza.
Muy triste Vicente ver a estos toreros con los despojos que nos echan, así no vamos a ninguna parte.
Esto es un mal endémico querido Paco, aquí salvo las dos primeras novilladas, estamos viendo despojos y algún Victorino. Espero que las noches de feria os hagan olvidar.
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