Vistas de página en total

Vistas de página en total

viernes, 20 de octubre de 2017

HIERROS QUE SE OLVIDAN

HOY CONCHA Y SIERRA, PURA SANGRE VAZQUEÑA




En 1873, don Fernando de la Concha y Sierra, con reses de Taviel de Andrade y de Castrillón, formó esta ganadería.
A la muerte de don Fernando, en 1887, la mayor parte pasó a su viuda, doña Celsa Fontfrede, de quien pasó a su hija doña Concepción de la Concha y Sierra en 1929.
En 1966, por fallecimiento de doña Concepción de la Concha y Sierra, se anunció a nombre de don Juan de Dios Pareja Obregón y García, el cual, a finales de 1968, se la vendió a don José Luis Martín Berrocal, siendo vendida en 1970 a King Ranch España, S.A., con la denominación de “Los Millares”.
En 1979 fue adquirida por don Miguel Báez Espuny, El Litri,  anunciando a nombre de “Toros de Concha y Sierra”.

La ganadería fue adquirida en 1994 por María Luisa, S.A. Explotaciones Agropecuarias, anunciándose a nombre de “Ganadería de Concha y Sierra”.
En 1997 se contamina el hierro con reses de los bodegueros, se adquieren 57 vacas de “La Dehesilla” y un semental de don José Luis Pereda. En 2007 elimina todo lo procedente de 'La Dehesilla' y José Luis Pereda, quedándo únicamente con ganado de puro encaste vazqueño.
En 2013 es adquirida por la SCEA ganadería, Curé de Valverde, se mantiene el hierro y se mantiene el anuncio. Las reses pastan hoy en Arles junto a las del Conde de la Corte adquiridas en 2012.
Cinco años han pasado desde su último paso por Las Ventas, una novillada de impecable presentación y buen juego.


Como aficionado añejo, considero una aberración el haber sacado este legendario hierro de las dehesas españolas y más cambiarla por lo comercial del Marques de Domecq.
Y volvemos a lo de siempre, exigencias de las "figuritas" comercialidad de los ganaderos que llevan a la fiesta al fraude y al final a su destrucción, ganaderos sin defensa ante la aberración que tienen que vender o matar sus reses perdiéndose encastes legendarios.
Hoy, en poder de Juan-Luc Couturier, espero el resurgir del hierro, alentado por la exigencia del aficionado del sur de Francia y sobre todo de la exigencia que practican de la variedad de encastes. Ha apostado fuerte el empresario francés, con la compra de dos hierros españoles muy extendidos por el campo bravo en diversos cruces, ojala que mantenga su pureza y los lleve a ocupar un puesto que les corresponde y que no hemos sabido dar en España.

No hay comentarios:

Publicar un comentario