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lunes, 1 de octubre de 2018

DOS ESTOCADAS, DOS OREJAS

30/09/2018. Madrid Las Ventas. Tercera corrida de Otoño, tres cuartos de entrada.




Toros del PUERTO DE SAN LORENZO / LA VENTANA DEL PUERTO, de buen juego 1º y3º, los del Puerto mansearon.

EMILIO DE JUSTO. Estocada Una oreja. Estocada. Una oreja.
ROMÁN. Estocada que atraviesa y descabello. Un aviso. Saludos. Dos pinchazos, estocada y cuatro descabellos. Un aviso. Silencio.
GINÉS MARÍN. Media estocada y descabello. Vuelta.  Cogido en el sexto. Emilio de Justo estocada delantera y descabello. Silencio.

De haber sido un desafío ganadero tan de moda, hubieran ganan los extremeños a los salmantinos, pero al ser el mismo dueño, todo queda en casa. Bien presentados en general, excepto el 5º, un buey de casi 700 kg manso, parado y topón.




Se abrió la puerta grande de Madrid, para un torero que tuvo el gesto de reaparecer con el cuerpo convaleciente y el alma herida por la pérdida de su padre. Pero vino con la intención y la mente puestas en el portón del 7/8. Corrió dos faena distintas, la primera, a un toro de La Ventana, de menos a más, con firmeza y defectos en las distancias, se dejó parte del  postre en el buen pitón derecho que tenía más, culminó el trabajo, con un estoconazo para el recuerdo. El cuarto, que tras el picotazo primero, empujó en el segundo encuentro con el jaco, llegó a la muleta bronco y distraído, tan solo al final consiguió Emilio bajar la mano y mandar, siempre descuidando las distancias, lo arregló con otro estoconazo histórico ganándose salir en volandas a la calle Alcalá.
Román enlotó dos toros mansos con poco recorrido, el que hizo segundo además tuvo la virtud de la distracción, salía del muletazo con la cara alta y mirando al tendido, en una de esas el morucho hizo carne y se echó al torero a los lomos, esfuerzo del valenciano en baldío. El quinto, un mulo de casi 700 kg manso y parado, permitió poco lucimiento, y Román contrariado y dolorido por el palizón tomó las de Villadiego.
Marín, enlotó el caramelo del encierro, Renacuajillo, era todo menos un cría de rana. El soñado para Madrid, con un pitón izquierdo de lujo. El jerezano faenó en la distancia con cites largos y pausas, pero el toro quería otra lidia, si bien hubo templanza en los muletazos, le faltó colocación, muy fuera de la suerte la faena no alcanzó el lucimiento. Fue cogido en sexto, herido en el rostro.

También vimos desmonterarse a Angel Gomez y a Pedro Valcarce en el pareo del cuarto y a Jesús Díez y Manuel Izquierdo en el sexto.

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