NOVILLADA ESCASA DE TODO

22/04/2018 Madrid. Las Ventas. Menos de un cuarto.

Novillos de Sando/Julio García. Bien presentados de diverso juego.

ADRIAN HENCHE.  Estocada. Silencio. Cuatro pinchazos y descabello. Un aviso. Silencio

MIGUEL ANGEL PACHECO. Dos pinchazos, estocada delantera y siete descabellos. Un aviso. Saludos. Pinchazo y estocada. Silencio.

EL ADOUREÑO. Estocada. Un aviso. Silencio. Tres pinchazos, bajonazo y estocada. Un aviso. Silencio.

Manso y con flojera el encierro de D. Julio García. Tan solo el segundo novillo repitió con codicia. Maltratados en varas, los hubo parados, rajados y buscando las querencias.

Henche, enlotó la peor pareja, el que abrió plaza, que había cantado de salida, se paró en la muleta y el madrileño, en lugar de abreviar, se fajó en una insulsa faena larga y aburrida. En el que hizo cuarto, que apenas se picó, acusó mucho la flojera en el último tercio, hasta el punto de hacer un intento de echarse.

Pacheco tuvo en su lote, al novillo de la tarde, un castaño de buenas hechuras que se empleó en el caballo, llegó a la muleta con buen tranco y el de La línea, corrió bien la mano ante la violencia de las embestidas, pero olvidó las distancias y la colocación. Al quinto, le recibió con verónicas de rodillas fue medido el castigo en varas por Isidoro Rubio a pesar de ello, acusó la flojera en la muleta. Faena a media altura para no molestar muy deslucida.

El francés que se presentaba en Madrid, es un novillero de toreo modernista, de corte muy escolarizado, que practica la modernidad a rajatabla, descolocado sin distancias y con ventajas. No obstante en su favor hay que decir, que el lote que sorteó no fue el idóneo para el lucimiento.