01/04/2018 Madrid. Las Ventas. Corrida de Resurrección. Media plaza.
Toros de El Torero. Muy bien presentados de gran movilidad y diverso juego, acusaron flojera y mansedumbre, salvo el sexto de mucha calidad, al que se le dio la vuelta al ruedo.
David Mora. Estocada. Un aviso. Palmas. Estocada desprendida. Un aviso Vuelta al ruedo.
Daniel Luque. Bajonazo que atraviesa, pinchazo, estocada corta y dos descabellos. Silencio. Cuatro pinchazos y descabello. Silencio.
Álvaro Lorenzo. Estocada caída Una oreja. Estocada desprendida. Un aviso. Dos orejas.
Eso le ocurrió a Alvaro Lorenzo, ¡Tocó el cielo!. Después de una faena justita y con momentos ramplones a Miliciano, que le dio el ánimo de meter una oreja en el esportón, se encontró con Viscoso, un toro para soñar, al que picó con mesura Francisco Javier Sánchez, bregó con dulzura Marcos Ortiz y toreó por momentos importantes el de Toledo.
Una faena por momentos maciza, comenzada con la quietud de los estatuarios, premiando el toreo al natural, muy templado y de mano muy baja y un final de faena, con doblones que reavivaron la llama, y a todo esto Viscoso, obedeciendo y repitiendo.
Alvaro ha sido un torero sorpresa en la tarde de ayer. Su trayectoria desde la alternativa en Nimes, ha estado llena de altibajos, pasó por Valencia más o menos de puntillas y tuvo que ser en Madrid, la plaza del aldabonazo, ojala le sirva.
Mora se llevó un lote espantoso, el que abrió plaza, que acusó flojera, estuvo David duditativo ante lo incierto del toro, solo Angel Otero, encendió los tendidos con dos pares supremos. En el cuarto, un manso de tiro de carreta, el madrileño, logró atenuar las constantes huidas y dándole las querencias, sacarle muletazos de mano baja y temple, de manera discontinua, aun así consiguió elaborar una faena que agradó hasta el punto de haber petición.
Luque se presentó en la capital con el ánimo muy bajo. No le favoreció su lote y faenó en las dos ocasiones, desganado, dando trapazos y enganchones.
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